Salmo 104 | |
---|---|
Bendice, alma mía, al Señor. Señor, Dios mío, tú eres muy grande. | |
Otro nombre |
|
Idioma | Hebreo (original) |
Salmo 104 | |
---|---|
Libro | Libro de los Salmos |
Parte de la Biblia hebrea | Ketuvim |
Orden en la parte hebrea | 1 |
Categoría | Sifrei Emet |
Parte de la Biblia Cristiana | Antiguo Testamento |
Orden en la parte cristiana | 19 |
El Salmo 104 es el salmo 104 del Libro de los Salmos , [1] comenzando en hebreo "ברכי נפשי" (barachi nafshi: "bendice mi alma"); en español en la versión King James : "Bendice al SEÑOR, alma mía. Oh SEÑOR, mi Dios, tú eres muy grande". En el sistema de numeración ligeramente diferente usado en la Septuaginta griega y la versión Vulgata latina de la Biblia, este salmo es el Salmo 103. En latín, se lo conoce como "Benedic anima mea Domino". [2]
El Salmo 104 se utiliza habitualmente en las liturgias judía , ortodoxa oriental, católica , luterana , anglicana y protestante. A menudo se le ha puesto música, incluidas obras de John Dowland , Heinrich Schütz , Philip Glass y William Lovelady .
La primera aparición del término "Aleluya" en el Antiguo Testamento se puede identificar en el Salmo 104, con instancias posteriores en los Salmos 105 y 106. Cabe destacar que O. Palmer Robertson percibe estos Salmos como una tríada cohesiva, que sirve como las composiciones finales del Libro 4. [3] Aleluya también aparecerá en el Salmo 113, Salmo 117, Salmo 135 y Salmos 146 a 150. [4]
El salmo tiene un notable parecido con el Gran Himno a Atón de Akenatón , escrito unos 400 años antes en Egipto. [5]
La siguiente tabla muestra el texto hebreo [6] [7] del Salmo con vocales junto con una traducción al inglés basada en la traducción JPS de 1917 (ahora en el dominio público ).
Versículo | hebreo | Traducción al inglés (JPS 1917) |
---|---|---|
1 | גָּדַ֣לְתָּ מְּאֹ֑ד ה֖וֹד וְהָדָ֣ר לָבָֽשְׁתָּ׃ | Bendice, alma mía, a Jehová. Jehová, Dios mío, muy grande eres tú; te has vestido de gloria y de majestad. |
2 | עֹֽטֶה־א֭וֹר כַּשַּׂלְמָ֑ה נוֹטֶ֥ה שָׁ֝מַ֗יִם כַּיְרִיעָֽה׃ | ¿Quién te cubre de luz como de un manto, quién extiende los cielos como una cortina? |
3 | הַ֥מְקָרֶ֥ה בַמַּ֗יִם עֲֽלִיּ֫וֹתָ֥יו הַשָּׂם־עָבִ֥ים רְכוּב֑וֹ הַֽ֝מְהַלֵּ֗ךְ עַל־כַּנְפֵי־רֽוּחַ׃ | ¿Quién pone las vigas de tus aposentos en las aguas? ¿Quién hace de las nubes tu carroza, quién anda sobre las alas del viento? |
4 | עֹשֶׂ֣ה מַלְאָכָ֣יו רוּח֑וֹת מְ֝שָׁרְתָ֗יו אֵ֣שׁ לֹהֵֽט׃ | ¿Quién hace de los vientos tus mensajeros, y del fuego llameante tus ministros? |
5 | יָֽסַד־אֶ֭רֶץ עַל־מְכוֹנֶ֑יהָ בַּל־תִּ֝מּ֗וֹט עוֹלָ֥ם וָעֶֽד׃ | Tú que estableciste la tierra sobre sus cimientos, para que no fuese conmovida eternamente y para siempre; |
6 | תְּ֭הוֹם כַּלְּב֣וּשׁ כִּסִּית֑וֹ עַל־הָ֝רִ֗ים יַ֖עַמְדוּ מָֽיִ ם׃ | Con el abismo lo cubriste como con un manto; Sobre los montes estaban las aguas. |
7 | מִן־גַּעֲרָ֣תְךָ֣ יְנוּס֑וּן מִן־ק֥וֹל רַֽ֝עַמְךָ֗ יֵחָפֵזֽוּן׃ | A tu reprensión huyeron, a la voz de tu trueno se apresuraron. |
8 | יַעֲל֣וּ הָ֭רִים יֵרְד֣וּ בְקָע֑וֹת אֶל־מְ֝ק֗וֹם זֶ֤ה ׀ יָסַ֬דְת ָּ לָהֶֽם׃ | Los montes se levantaron, los valles descendieron, hasta el lugar que tú habías fundado para ellos; |
9 | גְכַסּ֥וֹ ת הָאָֽרֶץ׃ | Pusisteles un límite, el cual no traspasarían, Para que no volviesen a cubrir la tierra. |
10 | הַֽמְשַׁלֵּ֣חַ מַ֭עְיָנִים בַּנְּחָלִ֑ים בֵּ֥ין הָnea ּכֽוּן׃ | ¿Quién envía los manantiales a los valles, que corren entre los montes? |
11 | יַ֭שְׁקוּ כׇּל־חַיְת֣וֹ שָׂדָ֑י יִשְׁבְּר֖וּ פְרָאִ֣ים צְמָאָֽם ׃ | Dan de beber a todas las bestias del campo, Y los asnos monteses sacian su sed. |
12 | עֲ֭לֵיהֶם עוֹף־הַשָּׁמַ֣יִם יִשְׁכּ֑וֹן מִבֵּ֥ין עֳ֝פָאיִ֗ם יִת | Junto a ellos habitan las aves del cielo, desde entre las ramas cantan. |
13 | מַשְׁקֶ֣ה הָ֭רִים מֵעֲלִיּוֹתָ֑יו מִפְּרִ֥י מַ֝עֲשֶׂ֗יךָ תִּשְׂ בַּ֥ע הָאָֽרֶץ׃ | Tú que riegas los montes desde tus aposentos; La tierra está llena del fruto de tus obras. |
14 | מַצְמִ֤יחַ חָצִ֨יר ׀ לַבְּהֵמָ֗ה וְ֭עֵשֶׂב לַעֲבֹדַ֣ת הָאָדָ֑ם ל ְה֥וֹצִיא לֶ֝֗חֶם מִן־הָאָֽרֶץ׃ | ¿Quién hace brotar la hierba para el ganado, y la hierba para el servicio del hombre, para sacar pan de la tierra, |
15 | וְיַ֤יִן ׀ יְשַׂמַּ֬ח לְֽבַב־אֱנ֗וֹשׁ לְהַצְהִ֣יל פָּנִ֣ים ׁ֑מֶן וְ֝לֶ֗חֶם לְֽבַב־אֱנ֥וֹשׁ יִסְעָֽד׃ | Y el vino que alegra el corazón del hombre, Y el pan que sustenta el corazón del hombre. |
16 | יִ֭שְׂבְּעוּ עֲצֵ֣י יְהֹוָ֑ה אַֽרְזֵ֥י לְ֝בָנ֗וֹן אֲשֶׁ֣ר נָטָֽע | Los árboles de Jehová se saciarán, Los cedros del Líbano que él plantó; |
17 | אֲשֶׁר־שָׁ֭ם צִפֳּרִ֣ים יְקַנֵּ֑נוּ חֲ֝סִידָ֗ה בְּרוֹשִׁ֥ים בֵּ יתָֽהּ׃ | Allí donde los pájaros hacen sus nidos; en cuanto a la cigüeña, los abetos son su casa. |
18 | הָרִ֣ים הַ֭גְּבֹהִים לַיְּעֵלִ֑ים סְ֝לָעִ֗ים מַחְסֶ֥ה לַֽשְׁפַנ ִּֽים׃ | Las altas montañas son para las cabras salvajes; las rocas son un refugio para los conejos. |
19 | עָשָׂ֣ה יָ֭רֵחַ לְמוֹעֲדִ֑ים שֶׁ֝֗מֶשׁ יָדַ֥ע מְבוֹאֽוֹ׃ | ¿Quién designó la luna para las estaciones? El sol conoce su puesta. |
20 | תָּֽשֶׁת־חֹ֭שֶׁךְ וִ֣יהִי לָ֑יְלָה בּוֹ־תִ֝רְמֹ֗שׂ כׇּל־חַיְתוֹ | Tú haces las tinieblas, y es de noche, En ella se arrastran todas las bestias del bosque. |
21 | הַ֭כְּפִירִים שֹׁאֲגִ֣ים לַטָּ֑רֶף וּלְבַקֵּ֖שׁ מֵאֵ֣ל אׇכְלָֽם | Los leoncillos rugen tras la presa, Y buscan de Dios su comida. |
22 | תִּזְרַ֣ח הַ֭שֶּׁמֶשׁ יֵאָסֵפ֑וּן וְאֶל־מְ֝עוֹנֹתָ֗ם יִרְבָּצֽו ּן׃ | Cuando sale el sol, ellos se escabullen y se acuestan en sus guaridas. |
23 | יֵצֵ֣א אָדָ֣ם לְפׇעֳל֑וֹ וְֽלַעֲבֹ֖דָת֣וֹ עֲדֵי־עָֽרֶב׃ | Sale el hombre a su trabajo, y a su labranza hasta la tarde. |
24 | מָה־רַבּ֬וּ מַעֲשֶׂ֨יךָ ׀ יְֽהֹוָ֗ה כֻּ֭לָּם בְּחׇכְמָ֣ה עָשִׂ֑י תָ מָלְאָ֥ה הָ֝אָ֗רֶץ קִנְיָנֶֽךָ׃ | ¡Cuán múltiples son tus obras, oh Jehová! Todas ellas las hiciste con sabiduría; la tierra está llena de tus criaturas. |
25 | זֶ֤ה ׀ הַיָּ֥ם גָּדוֹל֮ וּרְחַ֢ב יָ֫דָ֥יִם שָֽׁם־רֶ֭מֶשׂ וְאֵ֣ין מִסְפָּ֑ר חַיּ֥וֹת קְ֝טַנּ֗וֹת עִם־גְּדֹלֽוֹת׃ | Allá allá, grande y ancho, hay allí innumerables cosas que se arrastran, criaturas vivientes, tanto pequeñas como grandes. |
26 | שַָֽׁ ׂחֶק־בּֽוֹ׃ | Allí van las naves; allí está el leviatán, a quien tú has formado para que juegue en él. |
27 | כֻּ֭לָּם אֵלֶ֣יךָ יְשַׂבֵּר֑וּן לָתֵ֖ת אׇכְלָ֣ם בְּעִתּֽוֹ׃ | Todos ellos esperan en Ti, Para que a su tiempo les des su alimento. |
28 | תִּתֵּ֣ן לָ֭הֶם יִלְקֹט֑וּן תִּפְתַּ֥ח יָ֝דְךָ֗ יִשְׂבְּע֥וּן טֽ וֹב׃ | Tú se lo das, y ellos lo recogen; abres tu mano, y se sacian de bien. |
29 | תַּסְתִּ֥יר פָּנֶיךָ֮ יִֽבָּהֵ֫ל֥וּן תֹּסֵ֣ף ר֭וּחָם יִגְוָע֑וּ ן וְֽאֶל־עֲפָרָ֥ם יְשׁוּבֽוּן׃ | Escondes tu rostro, ellos desaparecen; retiras su aliento, perecen, y vuelven a su polvo. |
30 | תְּשַׁלַּ֣ח ר֭וּחֲךָ יִבָּרֵא֑וּן וּ֝תְחַדֵּ֗שׁ פְּנֵ֣י אֲדָמָֽ ה׃ | Envías tu Espíritu, son creados, y renuevas la faz de la tierra. |
31 | יְהִ֤י כְב֣וֹד יְהֹוָ֣ה לְעוֹלָ֑ם יִשְׂמַ֖ח יְהֹוָ֣ה בְּמַעֲשָֽׂ יו׃ | Sea la gloria del Señor para siempre; alégrese el Señor en sus obras. |
32 | הַמַּבִּ֣יט לָ֭אָרֶץ וַתִּרְעָ֑ד יִגַּ֖ע בֶּהָרִ֣ים וְֽיֶעֱשָֽׁ נוּ׃ | El mira la tierra, y ella tiembla; Toca los montes, y humean. |
33 | אָשִׁ֣ירָה לַיהֹוָ֣ה בְּחַיָּ֑י אֲזַמְּרָ֖ה לֵאלֹהַ֣י בְּעוֹדִֽ | Cantaré a Jehová mientras viva; salmearé a mi Dios mientras viva. |
34 | יֶעֱרַ֣ב עָלָ֣יו שִׂיחִ֑י אָ֝נֹכִ֗י אֶשְׂמַ֥ח בַּיהֹוָֽה׃ | Sea dulce mi meditación en él; en cuanto a mí, me alegraré en el Señor. |
35 | יִתַּ֤מּוּ חַטָּאִ֨ים ׀ מִן־הָאָ֡רֶץ וּרְשָׁעִ֤ים ׀ ע֤וֹד אֵינָ֗ ם בָּרְכִ֣י נַ֭פְשִׁי אֶת־יְהֹוָ֗ה הַֽלְלוּ־יָֽהּ׃ | Quítense de la tierra los pecadores, y dejen de existir los impíos. Bendice, alma mía, al Señor. Aleluya. |
Uno de los salmos más largos, el Salmo 104, se divide tradicionalmente en 35 versículos. [8] Comienza describiendo la gloria de Dios (“El que te cubres de luz como de un manto” v. 2).
En el texto masorético, la frase Aleluya se coloca al final del último versículo. Esto no está presente en la Septuaginta ni en la Vulgata , pero la versión King James la traduce como "Alabad al Señor".
El tema y su presentación están estrechamente relacionados tanto con el primer relato de la creación del Génesis (Génesis 1, cronológicamente más reciente que la segunda versión en Génesis 2), donde también las aguas se separan antes de la creación del Sol y la Luna, como con relatos escritos más antiguos de la creación del Antiguo Cercano Oriente , tanto mesopotámicos como egipcios. En particular, el Gran Himno egipcio a Atón (siglo XIV a. C.) se cita con frecuencia como predecesor. [9] [10] El erudito bíblico Mark S. Smith ha comentado que "A pesar del apoyo duradero a la comparación de los dos textos, el entusiasmo por una influencia incluso indirecta se ha atenuado en las últimas décadas. En algunos sectores, el argumento a favor de cualquier forma de influencia es simplemente rechazado de plano. Aún así, algunos egiptólogos, como Jan Assmann y Donald Redford , defienden la influencia egipcia tanto en la correspondencia de Amarna (especialmente en EA 147) como en el Salmo 104". [11]
En el Nuevo Testamento , el versículo 4 se cita en Hebreos 1:7 . [20]
En la Iglesia Ortodoxa Oriental , el Salmo 103 (Salmo 104 en el Texto Masorético) se lee diariamente al comienzo de las Vísperas , marcando el inicio de un nuevo día litúrgico . Forma parte de la decimocuarta división Kathisma del Salterio, que se lee en Maitines los jueves por la mañana, así como los martes y viernes durante la Cuaresma , en la Hora Tercia y Maitines , respectivamente. [21]
En las vísperas, el Salmo 103/104 es tradicionalmente designado para ser leído por el lector principal (es decir, el obispo si está presente, el anciano o abad de un monasterio, o el lector principal en el kliros ). En los días festivos en que se celebra la Vigilia Nocturna , este Salmo es cantado por un coro, tradicionalmente con varios estribillos entre los versos.
En el contexto de las Vísperas, este Salmo se entiende como un himno a la creación, en toda la plenitud con que Dios la ha creado: habla de los animales, de las plantas, de las aguas, del cielo, etc. En el ámbito del acto litúrgico, se suele entender como el canto de Adán , cantado fuera de las puertas cerradas del Edén del que ha sido expulsado (cf. Génesis 3). Mientras el lector canta el salmo, el sacerdote se sitúa fuera de las Puertas Reales cerradas , vestido únicamente con el epitraquilio , lo que hace más evidente este simbolismo.
Este salmo se utiliza durante la Vigilia Pascual en la noche del Sábado Santo (la Vigilia es la inauguración de la temporada de Pascua de cincuenta días, el final de la Semana Santa -y por extensión de la Cuaresma- y el final del Triduo Pascual de tres días de Jueves Santo , Viernes Santo y Pascua). En la Liturgia de la Palabra, la primera lectura es la historia de la Creación del Libro del Génesis , y el Salmo 104, que trata del mismo material, es el salmo responsorial . Se utiliza nuevamente durante Pentecostés, al final de la temporada de Pascua, como salmo responsorial para la Vigilia y la Misa dominical. [22] [23]
En el Libro de Oración Común de la Iglesia de Inglaterra , este salmo está previsto para ser leído en la tarde del día vigésimo del mes, [24] así como en las Vísperas del Domingo de Pentecostés . [25]
El filósofo alemán Johann Gottfried Herder comentó: «Vale la pena estudiar la lengua hebrea durante diez años para poder leer el Salmo 104 en el original». [26]
El músico Bob Marley creía que el consumo de cannabis estaba extendido en la Biblia, y que pasajes como el versículo 14 del Salmo 104 mostraban la aprobación de su uso. [27]
En The Whole Booke of Psalmes , publicado por Thomas Est en 1592, el Salmo 104 está adaptado al inglés por John Dowland , "Mi alma alaba al Señor". Heinrich Schütz compuso una versión en cuatro partes de un texto métrico alemán, "Herr, dich lob die Seele mein", SVW 202, para el Salterio Becker de 1628. En su cantata de 1726 Es wartet alles auf dich , BWV 187 , Bach adaptó los versos 27 y 28 al primer movimiento .
El himno "Oh Worship the King" de Sir Robert Grant , publicado por primera vez en 1833, está basado en el salmo. [28]
El Salmo 104, versículo 4, fue arreglado para coro mixto por Miriam Shatal en 1960. [29]
El Salmo 104, en hebreo, forma parte de Akhnaten , una ópera de Philip Glass.
El príncipe Felipe, duque de Edimburgo , encargó a William Lovelady una versión del Salmo 104 para celebrar su 75.º cumpleaños. El 17 de abril de 2021 se interpretó una versión abreviada de la cantata para coro a cuatro voces y órgano en su funeral en la capilla de San Jorge de Windsor .