Alicia en el País de las Maravillas | |
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Dirigido por | Edwin S. Porter |
Escrito por | Lewis Carroll (libro) |
Residencia en | Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas de Lewis Carroll |
Protagonizada por | Gladys Hulette |
Distribuido por | Compañía manufacturera Edison |
Fecha de lanzamiento |
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Duración del programa | 10 minutos |
País | Estados Unidos |
Idioma | Película muda |
Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas es una película muda en blanco y negro de 10 minutosrealizada en Estados Unidos en 1910, [1] y está basada en el libro homónimo de Lewis Carroll de 1865 .
Producida por la Edison Manufacturing Company y dirigida por Edwin S. Porter , la película fue protagonizada por Gladys Hulette como Alice. [1] [2] Al ser una película muda , naturalmente no se pudo utilizar toda la prosa sin sentido de Lewis Carroll y, al ser una película de un solo rollo, tampoco se pudieron incluir muchos de los personajes memorables de la novela original de Carroll de 1865. Lo que se utilizó en la película fue fiel en espíritu a Carroll y en diseño a las ilustraciones originales de John Tenniel . Variety elogió la película comparándola favorablemente con las fantasías cinematográficas "extranjeras" que inundaban los cines estadounidenses en ese momento. [3]
Alicia ve al Conejo Blanco corriendo, mirando su reloj de bolsillo. Intrigada, lo sigue por la madriguera del conejo hasta el País de las Maravillas. Aterriza en una habitación llena de puertas, pero las encuentra todas cerradas. Encuentra una llave en una mesa que abre una pequeña puerta. Frustrada por no poder pasar por la puerta, descubre que ha aparecido una botella en la mesa. Bebe su contenido y se encoge hasta el tamaño de la pequeña puerta. Al darse cuenta de que dejó la llave en la mesa y no puede alcanzarla, come un trozo de pastel que la hace crecer aún más que su tamaño original.
Ve al Conejo Blanco correr por la habitación y se pone tan triste que empieza a llorar. Llora un charco de lágrimas y se chapotea en él, pero se seca rápidamente. Luego, atraviesa la pequeña puerta que conduce a un jardín. El Conejo Blanco y otros animales pequeños se alarman al ver una mano gigante que se extiende a través de la puerta y salen corriendo. Encuentra un pequeño ventilador y, cuando se abanica, se encoge hasta la altura correcta para la puerta. Cuando finalmente emerge al jardín, se asusta al ver un cachorro enorme.
Al acercarse a una casita, ve a un lacayo-pez que le entrega a un lacayo-rana una invitación de la Reina de Corazones a la Duquesa. Los platos salen volando por la puerta, así que entra en la casa y encuentra a la Duquesa, la Cocinera, el Bebé y el Gato de Cheshire. La Cocinera agrega demasiada pimienta a su comida y la Duquesa, que estornuda, le entrega el Bebé a Alicia. Al salir con el Bebé, descubre que se ha convertido en un cerdito. El Gato de Cheshire aparece en un árbol y le dice: "Aquí todos estamos locos. Yo estoy loco. Tú estás loco".
Luego, Alicia se encuentra con una fiesta de té alocada, organizada por la Liebre de Marzo, el Sombrerero Loco y el soñoliento Lirón. Luego encuentra el jardín de topiarios, donde una baraja de soldados de naipes y otros miembros de la corte real saludan al Rey y la Reina de Corazones. Al ver algunas rosas que no han sido pintadas de rojo, la Reina regaña a algunas cartas de juego y grita: "¡Que les corten la cabeza!".
Alicia se retira a una habitación del castillo y asiste a una fiesta en la que el Rey y la Reina de Corazones descubren que la Sota de Corazones ha robado algunas tartas. Se inicia un juicio en el que el Sombrerero Loco, el Cocinero y Alicia presentan pruebas. Alicia molesta al Rey y a la Reina, y la Reina grita "¡Que le corten la cabeza!". Alicia está rodeada por un remolino de naipes y luego se despierta y descubre que su aventura en el País de las Maravillas fue un sueño.